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#Torreón. AL LARGUERO EL CABALLERO AZUL

Por Alejandro Tovar

Adam Grant (43) ameritado psicólogo de la Universidad de Pensilvania sostiene en su famoso libro “El potencial oculto” que el hombre debe luchar por tener una claridad conceptual y que: “El potencial no tiene nada qué ver con cómo empezamos, sino con lo lejos que estamos dispuestos a llegar”. Grant asegura que este hecho es más que el talento, capacidad o cociente individual.

Uno de sus millares de lectores, mismo que cumple con los preceptos de Grant, es el potente QB de los Bills, Joshua “Joss” Allen (28) que el domingo regaló al mundo de la NFL una maravillosa jugada, de esas que la gente disfruta sin que importe la casaca que prefiera. Porque acorde al libro, este formidable atleta mostró que en vez de despertar su ambición, aumentó su propia inspiración.

Allen mide 1.96 y pesa 108 kilos pero enfrentó a Kansas City con todo y el superastro Mahomes y los hizo morder el piso y se pusieron 9-2, dispuestos a ganar sus Bills por sexta vez la Conferencia Americana. Chiefs venía con quince partidos consecutivos sin perder y no contaba que Allen en una cuarta oportunidad fintaría a la izquierda donde ya había hecho dos TD con Curtis Samuel pero ésta vez, como un fantasma que irrumpe desde un mundo olvidado, se fue eludiendo gente por el centro y se sacudió a seis para entrar a la zona de anotación como Alejandro Magno frente a Darío en Persia. Joss está a la par de las hazañas de OJ Simpson con los Bills. Claro, el moderno héroe que viste de azul y soporta los fríos de Buffalo, lejanos de su cálida California, gana 43 mdd por año.

Dice Adam Grant en otra parte de su libro, que “la motivación es el fuelle que alimenta nuestro carácter” asunto extremo para muchos, que sí poseen lo primero y que lo segundo no aparece. Dicho esto por los comentaristas de tv, que dijeron cien veces “catrachos” a los jugadores hondureños, un gentilicio hipocorístico que viene de un héroe centroamericano, el Gral. Florencio Xatruch, hondureño que derrotó a las huestes de William Walker, mercenario de Tennesee que buscaban anexar Guatemala, Costa Rica, El Salvador y Honduras a USA. Los soldados de Xatruch eran feroces en la defensa de su territorio y Walker terminó siendo fusilado en Trujillo, Honduras en 1860. La gente gritaba cuando veía venir a ese ejército: “Ya vienen los Xatruchos” lo que fue derivando con el tiempo en “Catrachos” pero los de tv no lo comentan a su numeroso auditorio porque lo ignoran. Desconocen la fórmula para tener presente el pasado. El solo hecho de leer.

Ese mundo que el psicólogo Adam Grant nos incita a conocer y a tomar como propio, es lo ideal desde luego, pero el ser humano como tal vive de sus emociones, aunque sufra por ellas, como el caso de Lucas Ariel Ocampos (30) jugador argentino del Monterrey, que fue arrollado en la última fecha por el colombiano Edgar Guerra (23) del León con violenta entrada. Ocampos reaccionó y ambos fueron expulsados. Igual, los dos fueron sancionados con par de partidos por la Comisión Disciplinaria y como esos dos serán los de la eliminatoria de cuartos ante Pumas, Rayados opta por apelar para cuando menos solo uno haya de castigo, “porque el jugador fue provocado” cuando tal vez lo indicado sería sancionarlo y que él reconociera su falla que lastima a su equipo y que esto le ocurra siendo tan experimentado. Dijera de esto Grant; “Las personas de gran éxito tienen tres condiciones en común siempre: “motivación, capacidad y oportunidad”

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