#Torreón. DIVÁN POLÍTICO. Por Certero

+ Román hace amarres con transportistas
+ Jona coacciona a empleados en campaña
+ Mario Delgado, a justificar imposiciones
+ Oscar García, bravucón y pendenciero

AMARRE. A 13 días de concluir las campañas y a 17 de la jornada electoral, el candidato del PRI a la alcaldía de Torreón, Román Alberto Cepeda ha sostenido más 500 encuentros ciudadanos en colonias, ejidos, con empresarios, organizaciones de la sociedad civil, colectivos, creadores y otros, a quienes no sólo ha llevado su propuesta sino también ha escuchado sus planteamientos, lo que le ha valido -dice- para enriquecer su proyecto de gobierno de ganar las elecciones del próximo 6 de junio. Lo anterior se dio en un encuentro que sostuvo ayer con la Federación de Apoyo a Organizaciones del Transporte FAOT que encabeza Félix Caldera y en la que estuvo Sergio Felix Landeros con la representación de Tereso Medina. Ahí el ex secretario del Trabajo en Coahuila refirió que la estabilidad laboral que hoy el estado presume tienen que ver con la CTM y recordó en ello las luchas que se dieron en Acuña y Monclova cuando huestes de Gómez Urrutia pretendieron desestabilizar al pretender apoderarse de un contrato colectivo y que al final prevaleció la ley.

COACCIÓN. Vaya forma de operar la campaña electoral allá en Francisco I. Madero cuando aseguran que por las tardes los empleados municipales se cambian de cachucha y de también de chaleco, pues son llevados por el ayuntamiento a colonias y ejidos a trabajar en tareas de proselitismo en forma por demás burda y sin cuidar las formas. Aseguran que ni en los peores tiempos del priato sucedía esta forma de coacción, que significa obligar o forzar a una persona a realizar determinadas tareas en contra de su voluntad. Y es que al alcalde y candidato a la reelección Joathan Avalos no se le da mucho el tener una estructura de partido porque el partido es él. Por cierto, nada bien le fue en la campaña en el ejido San Esteban de Egipto, cuando el padre de una empleada de Seguridad Pública que sufrió acoso laboral y sexual por su jefe Jesús Sánchez enfrentó a este grupo advirtiendo que no era bienvenido ahí a hacer campaña, al tiempo que se supo que éste y dos de sus escoltas habían sido citados a comparecer al Centro de Evaluación y Control de Confianza, por lo que a partir de ayer elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del estado se encargan de rondines de vigilancia en el municipio.

VACUNADO. A quien le tocó ayer su vacuna de Pfizer fue al gobernador Miguel Riquelme Solís, quien este jueves acudió según correspondía a la  primer letra de su apellido y fue el secretario de Salud Roberto Bernal quien le aplicó la primer dosis al entrar en el segmento de la población de 50 a 59 años allá en Saltillo por el Parque Las Maravillas, estimando que en los siguientes 20 días pueda recibir la segunda dosis. Y aunque las comparaciones son odiosas, muchos son quienes se preguntan porqué Durango en la zona metropolitana no adoptó el exitoso esquema o estrategia aplicada en Torreón para la vacunación a través de la primer letra del apellido y ofreciendo además la opción de drive thru (en auto), pues de nueva cuenta de aquel lado del Nazas aflora el enojo entre los que acudieron a los puntos de vacunación al tener que esperar horas bajo los inclementes rayos del sol. La respuesta es sencilla, acá el Gobierno del Estado ejerció presión para tener mayor injerencia en el proceso de vacunación y hacerlo más fluido, de ahí que hasta los centros de trabajo acuden.

GIRA. Quien tuvo su gira ayer por esta región fue el líder nacional de Morena Mario Delgado, quien primero estuvo en Torreón en donde encabezó una conferencia de prensa para presentar a su candidato “Simi” -por aquello que es lo mismo pero más barato, Luis Fernando Salazar Wolfolk y trató de justificar el enojo de aquellos que han mostrado su desacuerdo con el cambio del candidato original por su papá. Y no es para menos, ya que esa jugada es igual de ilegítima y arbitraria como su imposición como líder nacional, cuando aún ganando Porfirio Muñoz Ledo, tuvieron que “hacer caer el sistema” para en una segunda ronda acomodar los votos y darle la dirigencia a modo prometida por su jefe el Presidente. De ahí se fue a Gómez Palacio donde acompañó al candidato a diputado federal al Distrito 02 Omar Castañeda y candidatos a diputados locales, donde tuvieron un evento con 300 a 400 personas en una techumbre en la colonia Otilio Montaño, en la que aseguran que al viejo estilo priístas las trasladaron en camiones en donde les pagaron 600 pesos a cada una, su lonche y refresco para aplaudir y vitorear lo que dijeran, en tanto afuera de los eventos fue perseguido por un grupo de inconformes que con tambores y grandes lonas le chiflaron, mentaron la madre y expresaron su rechazo por la imposición de candidaturas, no bajandolo de traidor, algo que no debe extrañar mucho cuando en cada ciudad que visita es recibido con esta manera.

TROPIEZO. Quién tuvo un mal día y hasta ternura dio, fue el dirigente estatal del Movimiento Ciudadano en Durango, Oscar García Barrón luego de la atropellada conferencia de prensa de ayer en Lerdo, pues fiel a su costumbre de apoderarse del uso de la palabra y no dejar hablar a ningún candidato, se atropelló con su propia lengua y lució muy mal ante los cuestionamientos de la prensa respecto a su pasado priísta, mismo partido al que momentos antes culpaba de todos los males que han ocurrido a Durango como la violencia, desempleo y corrupción, advirtiendo que ahora en alianza con el PAN-PRD iba a ser peor. Poseedor de tablas que le han dado los más de 45 años que presume tener en política, García Barrón perdió el control al no poder sortear la lluvia de cuestionamientos y bravucón se les fue encima a los reporteros diciendo que los habían afilado” temprano y en otros casos “chayoteado”, lo que provocó la ofensa y varios optaron mejor por abandonar el lugar. Quién mantuvo la cordura y la pena fue Roberto Carmona, quien se remolineaba en su silla y sólo inclinaba la cabeza, quizá por ser el más salvable en su pasado y su presente, mientras que Carlos Aguilera tuvo más salidas que un cerco viejo al ser cuestionado por los señalamientos de ser responsable del laudo laboral que obliga hoy al municipio a endeudarse 144 mdp, en fin aquello que era para brillar, terminó en un desastre.

EXTRA. Quién sirvió de consuelo al líder de MC, fue María Luisa González Achem, la también ex priísta y ex alcaldesa de Lerdo, pues al ser cuestionada sobre la denuncia en su contra ante la Fiscalía Anticorrupción por las 36 casas que le tienen incautadas, pasó de la explicación coherente a los gritos y a los golpes en la mesa en forma por demás alterada al ponerse al tú por tú con una reportera de una revista digital. El dato chusco lo dio el propio Barrón, cuando aseguraba que sus candidatos iban 80% arriba en las preferencias  electorales y al preguntarle por la casa encuestadora que hizo el ejercicio, dijo que lo había sacado del Face y que no necesitaba otros instrumentos.